Apasionado por la vida, curioso por naturaleza y siempre listo para una buena conversación. Me encanta reírme (mucho), descubrir nuevos rincones del mundo —o de un buen libro— y perderme en charlas que empiecen con una tontería y acaben en filosofía. Soy de los que creen que el humor inteligente es la mejor forma de seducción, que el vino mejora con buena compañía y que nunca se deja de aprender. Si te gustan las personas que escuchan, preguntan y disfrutan de lo sencillo con un toque de ironía... podríamos tener algo interesante entre manos.